Seis de los principales líderes de la organización criminal han ingresado en prisión

La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado la operación ‘Junmil’, una investigación dirigida a desmantelar una nutrida organización criminal asentada en la comarca del Noroeste murciano, que se ha saldado con la detención de 40 personas como presuntas autoras de los delitos de cultivo, elaboración y tráfico de droga, blanqueo de capitales, tenencia ilícita de armas, defraudación de fluido eléctrico y de pertenencia a organización criminal. Seis de los detenidos han ingresado en prisión.

En los registros practicados en 17 inmuebles, once de ellos en los municipios de Calasparra, cinco en Cehegín y otro en Caravaca de la Cruz han sido incautados 560 gramos de cocaína, 680 gramos de cogollos de marihuana, 700 gramos de sustancia de corte, cuatro plantaciones indoor con cerca de 600 plantas adultas de cannabis sativa, materiales para su manipulación, más de 28.000 euros, una carabina del calibre 22 mm. y nueve vehículos.

La investigación se inició el pasado mes de febrero, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la existencia de varios puntos de venta de cocaína al menudeo en las localidades de Calasparra y Cehegín, unos hechos que habían generado alarma social entre la población, según informaron fuentes de la Benemérita en un comunicado.

En colaboración con las policías locales de Calasparra y Cehegín se fue constatando el frecuente trasiego de personas, en los aledaños de varias de las viviendas objeto de la investigación, algunas de las cuales fueron sorprendidas con dosis de sustancias estupefacientes para su consumo, por lo que fueron propuestas para sanción.

El ‘clan’ de Calasparra abastecía a otros de Cehegín y Caravaca
Las pesquisas practicadas por los investigadores dieron sus frutos al identificar a los principales cabecillas, un clan familiar asentado en Calasparra que, al parecer, tenía como clientes a otros grupos delictivos que ejercían la venta de sustancias estupefacientes en los municipios de Cehegín y Caravaca de la Cruz.

Este clan, además, tenía sus propios puntos de venta al menudeo en Calasparra, llegando a emplear, incluso, a varios menores de su núcleo familiar para llevar a cabo la distribución de las sustancias al menudeo.

Los numerosos dispositivos de vigilancia e investigación permitieron ir identificando a cada uno de los sospechosos hasta determinar que formaban un estructurado grupo criminal que interactuaba entre sí para facilitarse distintos tipos de sustancias estupefacientes para abastecer sus puntos de venta.

Después de cuatro meses de investigación, los investigadores obtuvieron evidencias que permitieron determinar la participación, en distintos escalones del entramado delictivo, de un numeroso grupo de personas, por lo que fueron solicitados sendos mandamientos de entrada y registro para 17 inmuebles.

DISPOSITIVO POLICIAL CON MÁS DE 50 AGENTES

Recientemente, un amplio dispositivo policial formado por más de 50 guardias civiles especialistas en Policía Judicial, Unidades cinológicas con canes especializados en detección de drogas y dinero, de Seguridad Ciudadana y de la Agrupación de Reserva y Seguridad (A.R.S), con el apoyo de las policías locales de los municipios de Calasparra y Cehegín, llevó a cabo el registro simultáneo de las viviendas y de las naves objeto de la investigación.

Los registros se saldaron con la incautación de 560 gramos de cocaína, 680 gramos de cogollos de marihuana, 700 gramos de sustancia de corte, cuatro plantaciones indoor con cerca de 600 plantas adultas de cannabis sativa, materiales para su manipulación, además de más de 28.000 euros, una carabina del calibre 22 mm. y nueve vehículos.

La operación ‘Junmil’ ha culminado con la detención de 40 personas, en los municipios de Calasparra, Cehegín y Caravaca; y también en la provincia de Albacete, a las que se les atribuye la presunta autoría de los delitos de cultivo, elaboración y tráfico de droga, blanqueo de capitales, tenencia ilícita de armas, defraudación de fluido eléctrico y de pertenencia a organización criminal.

Según se desprende de la investigación los 26 detenidos en Calasparra, con vínculos de familiaridad, formaban el principal grupo de distribución de estupefacientes. La idiosincrasia de este clan favorecía tanto la distribución de tareas entre sus miembros, como el hermetismo generado en torno al grupo.

El resto, detenidos en Cehegín (11), Caravaca de la Cruz (1) y Letur (Albacete) (2) obtenían, presuntamente de los primeros, la droga para distribuirla entre sus clientes.

Se trata de 26 varones y 14 mujeres, de nacionalidades española y bosnia-herzegobina, de entre 17 y 62 años que, junto a la droga incautada, los efectos intervenidos y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del juzgado de Instrucción número 3 de Caravaca de la Cruz (Murcia), cuyo titular ha ordenado el ingreso en prisión de seis los detenidos.

EUROPA PRESS